El cohete chino Long March 5B está sin control y este fin de semana caerá en algún lugar de la Tierra. Se estima que se desintegrará casi en su totalidad y algunos pedazos caerán la atmósfera terrestre.
Se desconoce el punto exacto de su caída, sin embargo, podría caer en la franja comprendida entre las latitudes 41 del hemisferio Norte y Sur, lo que incluye por ejemplo buena parte de América Latina, el sur de Europa y África.
De acuerdo a la agencia de noticias EFE, el cohete que fue utilizado la pasada semana por China para lanzar al espacio uno de los módulos de su futura estación espacial, tiene una masa estimada que oscila entre las 17 y las 21 toneladas y un tamaño de unos 30 metros, lo que lo convierte, en el pasado cercano, en uno de los mayores trozos de escombros que reentrarían en la atmósfera, de ahí su vigilancia continuada.