La cifra de muertos por un aluvión que afectó varios barrios de Quito ascendió a 18, en medio del fuerte aguacero que azotó la capital ecuatoriana, con un récord de precipitaciones.
El general César Zapata, comandante de Policía del Distrito Metropolitano, explicó que 14 cuerpos se encuentran en medicina legal, dos más fueron trasladados esta mañana y otros dos fueron rescatados de entre los escombros.
Las autoridades y moradores temen que la cifra de víctimas aumente pues continúan las labores de rescate y búsqueda en viviendas e incluso en vehículos que fueron arrastrados por las aguas.
El Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias de Ecuador, tenía en sus registros la noche del lunes 31 de enero, a 9 personas desaparecidas, 200 afectadas y más de 30 heridas por el aluvión en varios barrios del oeste de la capital.
Familiares de desaparecidos se han sumado a las tareas de rescate, mientras clamaban a las autoridades por información. Aseguran haber recorrido morgues y hospitales en busca de sus seres queridos, sin lograr respuestas.
En la zona, los moradores intentaban rescatar sus enseres en medio de gruesas capas de lodo, en tanto al menos dos personas estaban atrapadas en partes altas de viviendas a la espera de que los bomberos los ayuden a salir.
Postes de tendido eléctrico caído, casas dañadas, automóviles destruidos, algunos en calidad de chatarra y una cancha de deportes completamente cubierta de lodo fueron algunas de las imágenes que se pudieron apreciar con más claridad con la luz del día de este martes.
Unidades de bomberos, policías, de las asistencias sanitarias y de las Fuerzas Armadas, entre otras instituciones, participan en las tareas de rescate, remoción de escombros y atención a los ciudadanos afectados en la zona del alud.
Según el alcalde de Quito, Santiago Guarderas, la tempestad que cayó el lunes sobre Quito alcanzó un récord de precipitaciones, con 75 litros por metro cuadrado, cuando se esperaba apenas dos litros por metro cuadrado. Esto, comentó, supone una cifra récord en casi dos décadas, pues un volumen de lluvias similar solo se había registrado en el año 2003.
El aluvión provocado por el temporal desbordó la capacidad de las infraestructuras de captación y embalse de las aguas lluvias que bajan desde el volcán Pichincha, que se erige al oeste de la ciudad, apuntó Guarderas.
El fuerte aguacero que cayó en la capital coincidió con una oleada de tempestades que han afectado a gran parte del país, especialmente a algunas provincias de la sierra andina y la zona costera.
Agencia EFE