Mediante la operación “Gran Impacto 5” del Plan Rescate Ecuador, la Policía Nacional detuvo a 10 personas que forman parte del grupo criminal “Los Lobos”, vinculados a los delitos de tráfico de drogas, tenencia de armas de fuego y el delito contra la inviolabilidad a la vida, según lo anunció la ministra de Gobierno, Alexandra Vela junto al comandante general de la Policía, Carlos Cabrera y otros generales parte del mando policial.
Las detenciones se dieron en allanamientos realizados en inmuebles de Quito, Guayaquil, Quevedo y Samborondón.
Como resultados se obtuvo cuatro armas de fuego tipo pistola, 31 municiones, tres alimentadoras, dos vehículos, 6.000 dólares en efectivo, cheques valorados por 10.000 dólares, y 49 kg de alcaloides.
La Ministra manifestó que esta detención golpea a una de las organizaciones más grandes que operan en el país. “Un golpe de esta naturaleza puede tener efectos en varios lugares. Puede aumentar la violencia por algún tiempo, al interior o al exterior de los centros carcelarios”. Fue enfática en señalar que esta es “prácticamente una guerra entre el Estado, la sociedad ecuatoriana y los grupos de delincuencia organizada”.
La Policía Nacional ha ejecutado varias acciones investigativas para desmantelar, identificar y detener a los cabecillas del grupo delictivo “Los Lobos”, que tiene su centro de operaciones en Quito, Guayaquil y Quevedo.
A esta banda se le atribuye el cometimiento de delitos violentos, por lo que se han ejecutado importantes acciones en coordinación con la Fiscalía General para la detención de los integrantes de esta banda. Es así que el 5 de marzo de 2021, en Quito, se detuvo a ocho sujetos liderados por Jefferson Granja (+), alias “Guismo”. El 16 de septiembre del mismo año y en la misma ciudad se aprehendió a Fredy V., alias “Piraña”. Mientras que el 11 de enero de 2022, en Los Ríos, se detuvo en flagrancia a Óscar M., alias “La Blusa”, quien habría participado de un conflicto violento donde dos personas fallecieron y tres quedaron heridas por disparos de arma de fuego.
A este grupo delictivo se lo vincula también con hechos de muerte y enfrentamientos que dejaron como resultados a tres personas fallecidas en Quevedo; el secuestro del hermano de “Don Nasa”, en Buena Fe; así como la muerte de cuatro personas al sur y al norte de Quito.