La turista mexicana con nacionalidad estadounidense que resultó atacada por un tiburón en las Islas Galápagos (Ecuador) este 5 de julio de 2023, contó que en un primer momento no se percató de la mordedura hasta que después vio sangre en el agua.
«Estaba llegando a la orilla y de repente sentí un golpe, pero no me di cuenta bien de lo que era», relató Delia Yriarte en declaraciones a Radio Encantada Galápagos, desde la cama del hospital donde fue intervenida quirúrgicamente.
«Luego sentí la pierna un poco más entumecida y pesada. Al ver que llegaba un pelícano cerca de mí, fue cuando me di la vuelta y ya vi que había sangre», detalló la víctima de la mordedura, ocurrida mientras hacía esnórquel.
Fue en ese momento cuando se puso «un poquito más nerviosa» y pidió ayuda a los compañeros del tour turístico en el que se encontraba para poder salir del agua y ser trasladada al centro médico.
El hecho ocurrió cerca del islote Mosquera, que se encuentra entre la isla de Seymour y la de Baltra, durante uno de los numerosos tours que se ofrecen en Galápagos para apreciar la actividad y biodiversidad de la especies que habitan en la segunda reserva más grande del mundo.
Yriarte fue intervenida en el Hospital República del Ecuador, de la isla de Santa Cruz, la más poblada del archipiélago, y de ahí trasladada en helicóptero a la isla de San Cristóbal para tomar un avión de la Armada de Ecuador a la ciudad de Guayaquil.
Allí seguirá recuperándose con la posibilidad de someterse a una nueva intervención de carácter estético para ocultar las secuelas de la herida.
La jefa del centro del servicio integrado de emergencias ECU 911 en San Cristóbal, Carla Reinoso, explicó que los ataques de tiburones a humanos son eventos nada frecuentes y de carácter muy aislado.
Son numerosas las zonas donde pueden apreciarse peces tropicales, lobos marinos, tortugas, iguanas, rayas y varias especies de tiburones de tamaño mediano o pequeño que no son potencialmente peligrosas para los seres humanos, por lo que un episodio como el ocurrido es extraordinario.
AGENCIA EFE