La Agencia Nacional de Regulación Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa), durante controles realizados en Cuenca, identificó que en una farmacia se aplicaban tratamientos invasivos, vendían muestras médicas y medicamentos sujetos a fiscalización, lo cual está prohibido.
Estas irregularidades motivaron la clausura del local, al que se inició un proceso sancionatorio que determina una multa económica que puede llegar hasta los 10 salarios básicos.
El artículo 172 de Ley Orgánica de Salud (LOS) indica que “en las farmacias y botiquines no se podrá ofrecer o dar consulta médica, obstétrica, odontológica, aplicar tratamientos, realizar toma de muestras ni tener laboratorios clínicos”.
En este caso, durante el control, se encontró jeringuillas listas para aplicar.
Así mismo, alrededor de 55 cajas de medicamentos entre muestras médicas que no pueden ser comercializadas, ya que está prohibida su venta; además medicamentos sujetos a fiscalización, comercializados sin receta médica.
En este mismo establecimiento se utilizaba el servicio higiénico como bodega para bebidas.
Arcsa inspecciona diariamente las buenas prácticas de dispensación farmacéutica; en la Zona 6 hay alrededor de 1300 farmacias y los controles técnicos son diarios. (I)